El ingeniero Guillermo Parra, gerente de Distribuidoras de Combustibles Asociadas del Paraguay (Dicapar), señaló ayer que, especialmente en oposición a las afirmaciones del Ministerio de Hacienda y de algunos técnicos, “efectivamente existen condiciones para un ajuste de precios de los derivados del petróleo en Paraguay”. “Hay que mirar el precio de los derivados, del gasoil, naftas y el alcohol producido localmente, y no el precio del petróleo crudo”, agregó.

“Las variaciones que se han registrado en los últimos meses, desde el 1 de marzo al 15 de mayo, en los derivados del petróleo (gasoil y nafta) han sido importantes, incluso hasta en un 50%”, señaló el directivo de Dicapar, aunque aclaró que no sabe cuándo ni cuánto será el aumento.

Al mismo tiempo, aclaró que como gremio no están haciendo el anuncio de la suba de precios, aunque reconoció que algunas empresas lo hacen en forma individual. Añadió que tampoco le están solicitando ni mucho menos presionando al Gobierno o a Petropar para que suban sus precios.

El ingeniero agregó que las empresas tienen almacenados combustibles comprados en el citado periodo de tiempo, y aunque se tome un promedio quincenal, mensual o semanal, “el resultado muestra que el costó subió con relación al precio actual, que por lo tanto se requiere un ajuste en el precio de venta al público”.

Incógnita. Sin embargo, el gerente de Dicapar explicó que no sabe cuál será el monto del ajuste ni cuándo se concretaría la modificación, ya que esta situación depende de cada empresa, de cómo gestionen su stock, “porque el piso es su costo y el techo es el precio de la competencia”.

Parra también estimó que una empresa puede elegir vender primero el combustible más económico, pero esto traerá consecuencias, ya que cuando este se acabe y quede el combustible caro se tendrá que hacer “un ajuste puntual importante”. Otra alternativa es hacer un aumento gradual, mezclando los precios de los diferentes productos, pero el ajuste es inevitable. “La estrategia va a depender de los costos que tenga cada empresa, y de los precios en el mercado, de la competencia. Por eso es que no se puede dar un número”, indicó.

Al mismo tiempo, el ingeniero señaló que el presidente de Petropar, Denis Lichi, dio la razón a las distribuidoras, anunciando que el combustible comprado hace unas semanas atrás es el combustible más caro recibido en la historia del Paraguay. “Coincidimos con el presidente Lichi que el combustible que hoy se está recibiendo en Paraguay es el más caro de la historia del Paraguay, y que hay un desfasaje importante entre los precios de venta al público y los precios del stock o de los combustibles que se están recibiendo ahora dependiendo de cada empresa”, insistió.

Igualmente, Parra advirtió que cuanto más se postergue el ajuste de los precios “más doloroso va a ser” para el consumidor final. Reiteró que están dadas las condiciones para una modificación de los valores, aunque repitió que desconoce cómo se trasladará el resultado al público. Además, indicó que desde el sector privado no se está conversando con el Gobierno, “al menos en forma gremial”.

Finalmente, Parra refirió que en el caso de los valores del gas licuado de petróleo son otras las variables a considerar, y si bien los precios son altos no se mueven necesariamente como los otros combustibles, y necesita de un análisis independiente.

50% es el porcentaje de variaciones registradas en los derivados del petróleo (gasoil, según gerente de Dicapar)./UH