La sequía se traduce en menos ingresos para los ganaderos debido al bajo peso de los bovinos y sobre todo implica sobrecostos en la compra de fardos y confinamientos para las terminaciones.
“Los animales que no están todavía preparados tenés que vender a los frigoríficos, deberíamos alquilar campos, pero tampoco hay establecimientos disponibles porque la sequía es generalizada, entonces ahí se complica un poco la situación”, comentó.
Otra opción es el confinamiento, donde la alimentación es a base de encarecidos balanceados, además de los costos que representa el pago de flete para los traslados. En contrapartida, los ganaderos no ven una compensación a la hora de entregar los bovinos terminados a la industria.
No solo se están vendiendo a bajo precio los novillos “casi terminados”, sino también los desmamantes. Según Cordeiro, estos pasaron de G. 14.000 por kilo a G. 12.000.
Alimentación. El dirigente de la ARP estima un aumento del costo de producción entre 40% y 50%, dependiendo de la toma de decisiones de cada establecimiento.
En simultáneo con la venta a frigoríficos, los productores se abastecen de fardos a un costo muy alto, teniendo en cuenta que una carga de 300 kilos cuesta alrededor de G. 350.000, superior a los G. 200.000 o G. 220.000 que se observaba el año pasado.
En alerta. Otro factor que amenaza a la zona son los incendios, aunque hasta el momento se detectaron solo pequeños focos, los pobladores permanecen en alerta.
Para evitar el fuego o mitigarlo, los trabajadores rurales participaron de un curso de capacitación organizado por la Secretaría de Emergencia Nacional. Diariamente el Gobierno avisa sobre los focos de calor que se registran en determinados puntos del país.
350.000 guaraníes cuesta una carga de fardo de 300 kilos que sirve para alimentar al ganado ante la falta de pasto.
50 por ciento subió el costo de producción en varios establecimientos ganaderos a causa de varios factores.
La Asociación Rural del Paraguay solicitará a la Dirección Nacional del Transporte una medida de excepción por el plazo de 6 meses para que los transportes de ganado puedan trasladar en los acoplados insumos para el campo como balanceados, fardos y todo lo que se necesita para paliar la sequía.
Esta decisión obedece a los estrictos controles en la ruta y la sanción a un caminero que transportaba aparentemente bolsas de carbón. El presidente de la Asociación Nacional de Transportistas de Ganado, Javier Riquelme, dijo que el gremio apoya esta medida y que trabajará para que sea permanente.
FUENTE: UH
